El autoconsumo se define como el uso de energía generada por una instalación para el consumo propio. En el caso de que sea una instalación de energía solar, esta generará directamente energía eléctrica a través de los paneles solares.
Estas instalaciones se dividen en instalaciones conectadas a la red o instalaciones aisladas (sin conexión con la red).
Las instalaciones que encuentran conectadas con el interior de una red de consumo pero que no cuentan con conexión eléctrica física con la red de transporte o distribución. El almacenamiento de energía con baterías es imprescindible en este tipo de instalaciones, con el fin de garantizar un suministro eléctrico durante 24 horas.
Si quieres olvidarte de pagar más facturas de la luz, o tu casa o empresa no tienen acceso a la red eléctrica, es la solución ideal.
Las instalaciones aisladas de la red están compuestas por paneles solares, un regulador de carga, acumuladores o baterías e inversores.
Son instalaciones que se encuentran conectadas con el interior de una red de consumo, pero también se encuentran conectadas con una conexión eléctrica física con la red de transporte o distribución. En este modalidad también podemos distinguir 2 tipos de instalaciones:
Autoconsumo directo
Consumes directamente la energía que produce tu instalación de autoconsumo eléctrico. La energía que no consumas la viertes directamente a la red, y en el caso de necesitar más energía de la que produce tu instalación, la cogerías también de la red. Con esta modalidad puedes ahorrar hasta un 50% en tus facturas de la luz.
Autoconsumo con acumulación
Consumes directamente la energía que produce tu instalación de autoconsumo eléctrico, y la energía que no consumas la almacenarías en baterías para necesidades posteriores. De esta forma consumes mayor cantidad de energía solar que la procedente de la red eléctrica, y conseguir ahorros en la factura de la luz hasta de un 80%.
Con el continuo aumento del precio de la luz muchas personas se plantean invertir en una instalación de placas solares para autoconsumo, con el fin de producir su propia energía verde y reducir su consumo.
Una instalación de autoconsumo fotovoltaico es un producto financiero en muchos aspectos, es capaz de generar rendimientos anuales que van desde el 10% a más del 50%. Se tarda una media de 4 a 10 años en amortizar la inversión. A partir de ese momento recibirá electricidad gratis durante el resto de los 25 años de vida útil de la instalación.
Algunas de las preguntas que debes hacerte para valorar la inversión pueden ser: ¿Pago mucho en factura de la luz?, ¿hay subvenciones disponibles en mi zona?, ¿cuánto me va a costar la instalación?, ...
El denominado “Impuesto al Sol” se encuentra en el Real Decreto 900/2015, por el que se regulan las condiciones administrativas, técnicas y económicas de las modalidades de suministro de energía eléctrica y de producción.
Hay que destacar que solo afecta a las instalaciones fotovoltaicas conectadas a red superiores a 10 kW de potencia, por lo que más del 90% de las viviendas unifamiliares están exentas. Aún en caso de aplicación, el autoconsumo sigue siendo rentable.
Desde luego, el autoconsumo energético no es simplemente un derecho, sino que en viviendas de nueva construcción es una obligación, ya que deberemos cubrir una parte de nuestra demanda energética con energías renovables.
A excepción de impedimentos técnicos, todos podemos disfrutar de nuestra propia instalación de placas solares que nos permita producir nuestra propia energía 100% limpia y renovable, con las múltiples ventajas que ello conlleva.
No es un cálculo realmente complicado, pero existen diversos factores que impiden dar una respuesta válida para todos los casos. A la hora de dimensionar una instalación solar debemos tener en cuenta la localización, la orientación, la inclinación, el consumo que deseamos cubrir…
Es por ello que nuestra recomendación es ponerse en manos de profesionales experimentados que nos guíen en nuestro camino hacia el autoconsumo. Mientras tanto, puedes obtener una primera aproximación de cuantos paneles solares necesitas para abastecer tu vivienda utilizando nuestro mapa solar.
Las ventajas de este tipo de instalaciones son muchas y las podríamos clasificar en dos grandes grupos como son los beneficios medioambientales y los socio-económicos.
Por un lado, generando nuestra propia energía 100% verde contribuimos a mejorar nuestro entorno de manera sustancial.
Por otro, obtenemos, ahorros considerables en nuestras facturas de la luz con retornos de inversión muy atractivos, además de impulsar un modelo energético más justo y equilibrado.
Poner placas solares en un tejado es una obra mucho más sencilla de lo que pueda parecer a primera vista y no supondrá ningún problema para un instalador experto - deberá contar con su certificado profesional correspondiente-.
A la hora de seleccionar a nuestro instalador es importante cerciorarnos de su buen hacer, es por eso que recomendamos solicitar varios presupuestos y comparar los perfiles de nuestras opciones, algo que podrás hacer fácilmente con nuestro servicio de presupuestos.
Es este uno de los apartados más complejos en la actualidad, ya que los requisitos necesarios para la legalización de una instalación de placas solares varían en función de las características de la misma.
Para tranquilidad de todos, en la gran mayoría de los casos se trata de trámites perfectamente definidos y sencillos de los que se encargará de gestionar tu instalador de confianza para que no te tengas que preocupar por nada.
Por último veremos paso por paso el desarrollo de una instalación fotovoltaica:
Hay que tener en cuenta que se tratan de instalaciones con una vida útil superior a los 25 años, y por lo tanto el mantenimiento juega un papel muy importante en el correcto funcionamiento de nuestra instalación de placas solares.
La mayoría de las instalaciones se limpian directamente con la lluvia. Sin embargo, en el caso de instalaciones de placas solares en zonas con alta contaminación, viento o polvo resulta recomendable limpiar los paneles solares 1 o 2 veces al año, bien con agua templada y una esponja o contratando este servicio a profesionales en el caso de de instalaciones de placas fotovoltaicas sobre cubiertas.